Tras mudarse al campo, Mona Hägerström empezó a añorar el trabajo práctico. Así que hizo un curso de apicultura y quedó fascinada por las abejas y su importante labor para la polinización y, en última instancia, para nuestro suministro de alimentos.
Mona adquirió sus propias abejas en el verano de 2021 y ahora tiene una explotación apícola con un pequeño número de colmenas. Durante los meses de julio y agosto lanza miel varias veces para ofrecer miel de distintas partes de la temporada. El sabor de la miel varía según el lugar donde las abejas hayan recolectado el néctar.
Mona también fabrica paños de cera de abeja -el gran sustituto del film transparente- y almohadas de trigo rellenas de grano cultivado en el KRAV y velas de cera de abeja. También vende cera de abejas a quienes quieren hacer sus propios ungüentos.
Mona vende su miel y otros productos principalmente en mercados locales, pero también es posible comprar directamente en la granja.
