Sesenta pares de pies que se alejan de la suave pendiente de piedra son una parte enigmática de la talla rupestre de Stora Rickeby. ¿Son las huellas de un dios tan sagrado que no puede ser representado? ¿O son las huellas de personas y dioses que, codo con codo, abandonan la piedra maciza por otra existencia? Hay muchas teorías sobre la cosmovisión de la Edad del Bronce, pero ninguna respuesta definitiva.
Otra imagen curiosa es una talla muy profunda con forma de prenda de vestir. Probablemente ha sido tallada una y otra vez como parte de un ritual, pero ¿por qué? Esa es la cuestión.
Stora Rickebyhällen está justo al lado de la carretera y es muy accesible. Hay una rampa para visitantes para que incluso los usuarios de sillas de ruedas puedan ver la talla.
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